
Soy el castillo de arena
que la marea arrastra.
Soy también
aquel que reconstruye el castillo,
arena insensible es mi alma.
Soy mi propia invención,
y todo en mi rehacer es falso.
A cada rato que pasa,
la marea me obliga a ser otro.
Otra sombra de un día.
Otra construcción
que no conciba
lo terrible de su poca importancia.
lo terrible de su poca importancia.