23 feb 2025

Desencantado








La literatura es la ficción de la verdad. El constructo por el cual tendemos a pensar que ciertas verdades anidan al fondo de nosotros mismos, y que éstas nos incumben desde hace mucho como especie.

Esta ficción, como todas las demás ficciones, no es más que una gran mentira.

Mentira lanzada contra el mundo para ocultar que la mayoría de nosotros, durante la mayor parte del tiempo, somos otra mentira aún más débil que esa otra creación capaz de suplantarnos.



Sobre la desaparición







No tenemos ojos.

De hecho, existimos porque somos ciegos.

Nadie puede vernos claudicar, 
aunque desde las murallas el infierno
los herméticos poetas vociferen nuestros nombres. 

La ceguera, fría imposición crepuscular, 
nos empuja a imaginar a tientas 
quiénes somos cuando trascendemos.



14 feb 2025

Terror nocturno



Ante el apocalipsis,
siempre estaremos solos. 

Y no se trata de una soledad cualquiera.

Es la prueba misma 
de que miles de insondables años de dolor 
podrían haber sido en vano.

Ante esto, 
recordad que ante nuestra propia muerte, 
también estaremos solos. 

Completamente solos. 

Todo cuanto hemos iniciado, 
lo devorarán las sombras de las que venimos. 

5 feb 2025

Al principio







Volveremos luego hacia el origen, madre. 

Seremos solo el sentimiento enajenado
que exhausto vaga por el mundo,
mas no tendremos ojos para comprender la luz.

Volveremos luego hacia el origen.

Madre creadora de cualquier pasado, 
eres tú el principio
donde desemboca ensimismada
la insensata soledad que atravesamos.

En ti hallaremos la medida justa del dolor
y el oculto páramo de la misericordia
y la individualidad que tantas veces rechazamos. 


1 feb 2025

Convenir la nada







Imaginé la muerte de la imaginación. Después les dije a todos la verdad que sabían desde siempre. 

Imaginé también el triunfo de esa misma verdad una vez muerta la imaginación.

Descendí así hacia algo extraño y sin forma.

Ahora sufro de algo imaginario, de un insomnio que no admite despertar. He imaginado el cansancio de la realidad, que es la realidad misma. El mismo sueño que están todos obligados a soñar.