26 nov 2024

Conciencia de lo incierto








Más vacío suena el vacío desde lo vacío.
Y la plenitud es nada.
Nada nos aleja. Nada nos retiene.

Emite el infierno una cegadora luz,
e ignoramos todavía el dolor que nos moldea. 
 
Como un jinete hueco,
lo sublime y su negación del mundo
nos enfrentan con el cuerpo corroído
que no debe detener el pensamiento.

Actores somos de un temblor soberbio.
Y aún brillamos.
 
Más vacío suena lo vacío desde la verdad.

Más extraña se presenta la belleza
desde la irreal textura del fracaso.
 
Hemos adorado a un millar de ídolos obscenos,
y el fuego que nos une, 
tal inútil oración que nos condena, 
no resuena más que como turbulento ruido. 




22 nov 2024

Los demás extraños







Eres ya consciente 
de que podrías haber tenido trato,
en algún lugar que olvidas,
con un frío violador
o con algún psicópata desconocido. 

Nuestra percepción de los demás, 
en su acepción más real, 
será la más oscura de las mascaradas. 


13 nov 2024

El signo y la sangre



Durante muchos años ensayé mi ira.

Mientras los mejores dormían,
cuando más atenta era la tarde. 

Cavé después la hermosa tumba de los débiles,
sobre la que anidarán los pájaros. 

Semejante era mi ira
a la sabiduría de los muertos estivales:
conocía la crudeza del temblor exacto,
el error por el que ciertas flores 
significan algo todavía. 


4 nov 2024

La culpa



En esta isla, la realidad se impregna de una extraña nobleza ante las peores personas. Pasé mi juventud intentando descifrar sin ningún éxito en qué consistía esa poética. Pero para mí —y como ya he dicho: en esta isla —, el hecho de participar de esa oscura espiritualidad, es el único momento interesante de todo el incomprensible juego de la existencia.


3 nov 2024

Demasiada luz







Las palabras sí alcanzan el oscuro centro.

A través de ellas, 
se puede transmitir un doloroso entendimiento
del meollo de la existencia. 

También se pueden sofisticar 
las mentiras más corrientes,
y arrastrar a nuestro interlocutor
hacia el más previsible de los infiernos.

Creemos ciegamente en ellas,
y por ello pueden abarcar todo lo existente
y lo inexistente,
socavando ya por siempre
la vulnerabilidad de nuestra conciencia.