Furiosa la tristeza. El
atardecer, la plaza clausurada y el invierno.
Convéncete: arráncame esta piel, ignora esta traición de perro abandonado. Que la atmósfera del tiempo no encuentre más labor que la inmediata.
Convéncete: arráncame esta piel, ignora esta traición de perro abandonado. Que la atmósfera del tiempo no encuentre más labor que la inmediata.
Y abramos más los ojos.
Y hallemos otra acción frente a la luz, y aquella ligereza que el amor descalzo presiente en la mañana. Que el aire que habitamos desde siempre, se abra fácilmente en pura cercanía hacia la infancia.