
Odio es lo que llevamos dentro.
Demasiadas veces hemos sido
víctimas de un rapto
demasiado fuerte y demasiado humano.
Vocación de sangre,
espectrales sueños que parecen
extraídos de un macabro cuento.
Es el odio en su ignorancia,
repitiendo con dureza lo que ya sabemos.