8 jun 2009

apunte


Puede que la actitud del fatalista no difiera tanto de la del soldado que se hace el muerto durante el combate. Ambos evitarían cualquier tipo de enfrentamiento directo por la victoria de lo convenido, posiblemente debido a un vivo instinto de conservación, a un profundo conocimiento interior del desenlace de casi todos los combates.

Pero lo más probable es que ambos traten desesperadamente de no resignarse a una muerte sin sentido.