21 ene 2013

Quién fuera otro



Pero, ¿sabes?, por descabellado que resulte, si cualquier persona de este mundo quisiera por momentos dar asco y solo asco, lo más probable es que realizara fácilmente su propósito sin tener que esforzarse demasiado. Pero ante tal actitud puede haber otras muchas reacciones. La compasión, por ejemplo. Y es ahí donde el extraño problema empieza a diversificarse hasta lo infinito...