26 ago 2007

te pedirán una señal de amor
cuando repares mansamente
en la ciudad que muestra el aburrimiento
-negro espejo de cifradas soledades-
que traza vientos
que esconde a tantos muertos
como a pobres viajeros del otoño
eterno

sin embargo
si das lo que no te pido
si accedes a este sencillo juego
ante los nombres del agua
ganarás la fugaz palabra
que guarda el carcelero

ese susurro incierto
del deseo incierto

quiero