La
gracia de hacer las cosas bien es que al fin te dejan tranquilo. Puedes
ser tú mismo: lo social y sus intensidades pasan a un cuarto o quinto
plano. Solo tienes que encontrar una constancia, un empeño en soledad
que te lleve a sentirte realizado.
Cuando uno hace lo que tiene que hacer, la imbecilidad de según qué gente se vuelve un problema exclusivamente suyo.
Donde dice: "artista reprimido", léase: "artista torturado". Y entiéndase por esto la influencia del sadismo en su existencia.
Cuando uno hace lo que tiene que hacer, la imbecilidad de según qué gente se vuelve un problema exclusivamente suyo.
***
Donde dice: "artista reprimido", léase: "artista torturado". Y entiéndase por esto la influencia del sadismo en su existencia.