31 jul 2011

10 jul 2011

Suspicacia

Cedieron todos los barrotes,
volaron pájaros y viento.

El rostro del culpable
negó el amor desde la niebla.

Ahora la verdad sucede
al mismo tiempo que los hechos.

6 jul 2011

Dignidad

Y no renunciar nunca por amor a lo único que el amor mismo precisa para darse...


4 jul 2011

Recordatorio urgente

Lo digo para no olvidarme:

sembrar luz cada día,

compartir,

siempre y con quien sea,

el color, la expectación, el agua:

la diaria plenitud

unida fácilmente a la palabra.


Sembrar, y recoger luego si la noche

no ampara más lugar en sus abrazos.


El único secreto es ese,

la única ciencia concebida

en bien de los que huyen.


Lo digo para no olvidarme,

para que nunca olvide mi enemigo

que yo también soy alguien.

1 jul 2011

Totalidad

Fuimos niños. Palabras como “mundo”, “totalidad” o “absoluto”, tuvieron para nosotros un sentido evidente y elevado. A través de estos términos, reconocíamos la realidad como unidad, y a nosotros mismos en ella. Luego el tiempo se abrió paso, y esa “totalidad” quedó fragmentada en multitud de elementos simbólicos que ahora ocupan un lugar concreto en nuestra circunstancia. Hoy, decir amor, no es nombrar el pulso profundísimo que a todos absuelve al evocar las lides del destino. Esta palabra, a lo sumo abarca una sonrisa, un beso o un encuentro, casual o premeditado, en algún escenario ya sabido.


En estos elementos subyace la reminiscencia de todo cuanto hayamos perfeccionado, albergando la unidad cósmica en un solo pasaje que podemos mimar o sacrificar en conveniencia.

Última consecuencia (reescripción)

en penitencia...

Enmudeció la lámpara del ánimo febril,
dejando tan sólo la compañía azul
de múltiples silencios encontrados.
Tomó la primavera la fuerza de tu abrazo
y el oro contemplado en tu cabeza

cayó del sol: perfecta luz sobre mi hombro,

temblor callado.

Si fueras tú de amor

como el aire que hollamos,
tal vez me hubieras dado, para las horas,
el desasosiego natural que precede a la dicha.

Pero la duda equilibraba el corazón,
evitando que la luz consumara su agonía.


El amor, la acción que ciega a los amantes,
poco sabe acerca de simples verdades:
para ellos es posible todo lo anhelado.

Para ellos no hay mentira que no sea verdad;
pero la verdad, ángel que sólo sirve a la razón,
no puede revelar su fuerza

sin provocar el daño.