2 ago 2008

Te miro y sé qué son los días.

Somos nosotros alejados, conscientes,
desenmarañando los secretos de la luz.

El sol aúlla como un perro enamorado.

Somos nosotros, desnudos,
atentos al azul infinito de los barcos.

Esto podría ser la vida.
Esto también es la vida.

Somos nosotros despertando,
aunque nadie sepa para qué soñamos.

La sombra urbana del deseo
se parece a tu triste conmiseración
cuando te acercas tan despacio
a mis noches definitivas.

Somos nosotros y el futuro
que no puede ser nuestro.