20 mar 2007

Cicatriz de la utopía, el tiempo te sentencia:
ayer eran arpegios tejiendo su armonía.
Hoy son ya cadáveres al sol indiferente.

Felices fuimos, felices e inconscientes:
primerizos que cantaban la verdad propia,
lejos de la norma impuesta por el odio.
Hoy son tus desvelos, la sórdida experiencia,
el torpe proceder de un juego cruel
que proyecta cada ausencia al infinito.

Cicatriz de la utopía,
límite del cielo…
Hoy son sólo náufragos, roídos de salitre,
perdidos en la playa muerta del silencio.