14 jun 2006



EL REFLEJO DEL MAR


El mar empieza en tus ojos y en tus ojos crece...
reflujo de sal, en tu mirar ausente, crece.
Y hasta abarcarlo todo se asemeja al tiempo,
hasta tornarse mar no es más que silencio.
Una orilla triste pudiera ser tu pensamiento,
un horizonte eterno quizás fuera tu sueño.
Pero tu mirada sería ese inmenso espejo
en el que contemplar despierto lo que duerme dentro.
Ese mar me aguarda bajo el cielo gris del alba...
Pero no son tus ojos. Es mi rostro dentro de ellos
con la extraña expresión de un enamorado muerto.